Netflix prueba a bajar tarifas, y empieza en Latinoamérica

Corren tiempos agitados en Netflix, con un mar de fondo que repercute sustancialmente en los suscriptores de la plataforma. Tras años de liderazgo absoluto y lo que parecía un paseo por las nubes, los resultados económicos presentados por la compañía a principios del año pasado fueron todo un jarro de agua fría que tuvo, como principal consecuencia, que la compañía empezara a replantearse sus números, para ser más exactos los que rigen su relación con los suscriptores, es decir, sus tarifas y limitaciones.

Parecía un movimiento arriesgado subir las tarifas precisamente cuando se están produciendo más bajas y, además, los precios de toda tu competencia son más competitivos que los tuyos, pero pese a ello el primer frente que decidieron abrir fue el de empezar a monetizar las cuentas compartidas. Es cierto, en rigor, que las condiciones marcadas por Netflix a este respecto siempre han sido las mismas, un hogar, una suscripción, pero sería cínico negar que buena parte de su crecimiento en años anteriores se debió a la extrema laxitud por parte de la compañía en este punto.

La compañía inició sus pruebas a este respecto hace ya cerca de un año en en Chile, Costa Rica y Perú, posteriormente lo extendió a República Dominicana, Argentina, Honduras, Guatemala y el Salvador y hace poco más de una semana, en un movimiento que ya había sido adelantado, el hachazo a las cuentas compartidas llegó a España, entre otros países. El precio adicional por cada perfil no conviviente es de 5,99 euros, y aquí te contamos cómo seleccionar la ubicación principal y añadir un perfil «externo».

Hasta ahora teníamos bastantes dudas sobre cómo había encajado el modelo de pago adicional en Latinoamérica y, claro, cómo se trasladará estos a otros mercados, principalmente al nuestro. Hay algunas predicciones muy interesantes al respecto, como la que puedes ver en la imagen inferior, pero todavía es pronto para saberlo. Eso sí, si tenemos en cuenta que la experiencia latinoamericana ha debido suponer un buen aprendizaje para la compañía, todo apunta a que los números no cuadran.

Tanto es así que si revisamos ahora los precios, veremos que se ha producido un movimiento muy llamativo, puesto que Netflix ha reducido sustancialmente las cuotas mensuales en bastantes países de Latinoamérica. Los porcentajes de descenso del precio no son los mismos, pero en todos los casos son destacables. Así es cómo han quedado las tarifas de Netflix en dichos países tras este ajuste:

Bolivia, Cuba, Nicaragua, Paraguay y Venezuela

• Plan Básico: 3,99 dólares (antes 7,99 dólares)
• Plan Estándar: 5,99 dólares (antes 10,99 dólares)
• Plan Premium: 7,99 dólares (antes 13,99 dólares)

Panamá

• Plan Básico: 4,99 dólares (antes 8,99 dólares)
• Plan Estándar: 8,99 dólares (antes 12,99 dólares)
• Plan Premium: 12,99 dólares (antes 15,99 dólares)

Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras y República Dominicana

• Plan Básico: 4,99 dólares (antes 7,99 dólares)
• Plan Estándar: 7,99 dólares (antes 10,99 dólares)
• Plan Premium: 10,99 dólares (antes 13,99 dólares)

Como puedes comprobar, algunas suscripciones han descendido hasta un 50%, con descensos que van de los tres a los seis dólares.

¿Cómo debemos interpretar esto? Pues entiendo que precisamente en la clave de lo que indicaba al principio, es decir, en el contexto de una competencia más fuerte que nunca y, además, más barata. Y aunque de momento esta bajada de precios solo se aplica a Latinoamérica, ya vimos el año pasado que ese es el mercado escogido por la compañía para realizar este tipo de pruebas, por lo que tiene bastante sentido esperar que, en algún momento, veamos movimientos similares en el resto del mundo y, especialmente, en aquellos países en los que el hachazo a las suscripciones compartidas ya puede estar teniendo un coste importante en el volumen de suscriptores.