Cambiar la contraseña del Wi-Fi, ¿es necesario hacerlo con frecuencia?
La contraseña del Wi-Fi es clave para mantener protegida nuestra conexión a Internet. Esta actúa como una barrera que impide la entrada a posibles intrusos, y haciendo una sencilla analogía podemos considerarla como el equivalente a la llave que mantiene cerrada la puerta de nuestra casa. Dicha analogía nos permite, además, entender su importancia.
Si la contraseña que utilizamos para el Wi-Fi es débil esta pondrá las cosas muy fáciles a los intrusos, y tener uno o varios intrusos en nuestro Wi-Fi no es para nada agradable, porque estos pueden acabar consumiendo todo el ancho de banda de nuestra red, y esto nos dejará con una conexión muy lenta y cargada de latencia, lo que hará que la experiencia sea terriblemente mala.
Por suerte, si tenemos uno o varios intrusos en nuestra red Wi-Fi lo tenemos muy fácil para librarnos de ellos, solo tenemos que cambiar la contraseña y listo, esto será suficiente para que no puedan volver a conectarse salvo que descubran la nueva contraseña. Con esto en mente, es fácil entender por qué algunos usuarios suelen cambiar la contraseña de su Wi-Fi cada cierto tiempo, ¿pero realmente es necesario hacerlo?
Es una buena pregunta, y la verdad es que en líneas generales no es necesario, siempre que hablemos de usuarios particulares, y siempre que mantengamos un mínimo de sentido común a la hora de gestionar la contraseña de nuestra red Wi-Fi. En el caso de comercios, oficinas y establecimientos públicos donde se comparta la contraseña del Wi-Fi bajo ciertas condiciones sí que puede ser recomendable hacer cambios frecuentes de contraseña, y establecer límites en el tiempo de conexión.
Con todo, también hay excepciones a esa regla general aplicable a usuarios particulares, como tú y como yo. Por ejemplo, si se celebra un evento familiar o con amigos y acabas compartiendo la contraseña de tu Wi-Fi con mucha gente sería recomendable cambiar la contraseña del mismo cuando este finalice, y también sería una buena idea cambiar la contraseña con cierta frecuencia si has tenido intrusos de forma continúa durante los últimos meses, ya que esto podría evidenciar que tienes a un intruso en las cercanías que sabe muy bien cómo atacar una red Wi-Fi tirando de fuerza bruta, aunque obviamente estos casos no son normales.
Si utilizas una contraseña segura, y si mantienes esta a buen recaudo, es decir, no la compartes con personas que no sean de confianza ni haces cosas que puedan facilitar que caiga en malas manos, en principio no tienes nada de lo que preocuparte, y no será necesario que la cambies con frecuencia. En mi caso, tuve un intruso en mi red Wi-Fi hace muchos años por mantener la contraseña por defecto, pero tras cambiarla no volví a tener ningún intruso, y no cambié esa contraseña en años.